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Ampuero, Cantabria, España |
Pillows and pillowcases in Spain are not single, but joyfully double in length. What a romantic and lovely discovery!
Almohadas y almohadones en España no son individuales, sino doble en alegría. ¡Qué descubrimiento más romántico y hermoso!
Hace cuatro meses hoy leímos estas palabras en la ceremonia de nuestra boda:
Nos entendemos y nos comprendemos; nuestras almas hablan el mismo lenguaje: El lenguaje de la Fe, la Esperanza y el Amor. Hemos sufrido sin perder ni la Fe ni la Esperanza; sin renegar del Dios Providente, del Dios que es Amor.
Nos casamos porque seguimos confiando en Dios, como Job, que en medio de sus desgracias tampoco renegó de Dios, ni siquiera cuando a ello le incitaban sus amigos.
También a nosotros nos hablan los amigos diciéndonos lo que tenemos que hacer.
Algunos solo ven problemas, otros nos invitan a vivir la libertad sin mayor compromiso que el interés inmediato, sin esperanza de futuro estable. Nos han dicho, “Ya estuvieron casados ¿No se han quedado ya escarmentados del matrimonio?”
Pero nosotros miramos y escuchamos en último término al Espíritu Santo de Dios.
Por eso no hemos quedado escarmentados del matrimonio; sino que creemos en el Amor, pues Dios es Amor, y creemos en el compromiso serio que conlleva el amor.
Tenemos seis hijos entre los dos. Y esperamos que nuestro matrimonio sea también también un testimonio para ellos; para ellos y para nuestra comunidad de amigos, vecinos y conocidos.
Four months ago we read these words during our wedding ceremony:
We understand each other fully; our souls speak the same language: It is the Language of Faith, Hope and Love. We have suffered without losing faith or hope, without denying our caring and loving God, our God who IS Love.
We are marrying because we trust in God, like Job, who chose God. Even in the midst of his misfortunes. Job never turned away from God, even when his friends incited him to do so.
Just like him we have had friends tell us what we should do. Some of them can only see problems ahead for us, others have invited us to live together without the commitment of marriage, without a stable future together. They have said, “You’ve been married once already. Haven’t you already been burned?”
But, we look and listen to the final word of the Holy Spirit of God.
That is why we haven't been burned by marriage; rather, we believe in Love, for God is Love and we believe in the serious commitment that comes with Love.
Together we have six children. For them, for our community of friends, neighbors and acquaintances we hope that our marriage will be a testimony of Love.